La rebelión de Sasha Grey: Smash cut y The Girlfriend Experience

Yo no la conozco de nada, lo juro, pero resulta que Sasha Grey es una de las pornstars jóvenes más famosas y solicitadas del momento. Eso dicen.

El caso es que, harta de que sus grandes actuaciones lleguen a un público reducido, o de que sus películas nunca se vean enteras o de figurar en los pósters, pero de esos que no le puede enseñar a su madre, Sasha Grey ha tomado la decisión de destaparse -es un decir- y adentrarse en el mundillo de un cine más comercial del que acostumbra, aunque tampoco sin pasarse.

Sus dos primeros intentos verán la luz de manera casi simutánea, una será una producción de horror y gore, rodada con cuatro duros, llamada Smash Cut, la otra una película casi independiente rodada con cinco duros, una rareza del rarito Steven Soderberg -que cuando se pone rarito lo cuadra-, The Girlfriend Experience.

Smash Cut.

Pongo ésta en primer lugar porque me interesa un poco más que la otra, aunque me temo que las pelis de Sasha Grey que más van a gustarme son las que ha hecho ya, ésta por lo menos me hace gracia.

Smash Cut es una comedia ultraviolenta, visceral y descerebrada como debe ser el buen gore palomitero y fumeta. En ella una hermosa bailarina de striptease acepta la proposición de un director de cine acabado para protagonizar su próxima película de terror, sin embargo un desafortunado accidente de coche terminará con la bailarina hecha pedazos y al tipo no se le ocurrirá mejor idea que esparcir sus restos por el set de rodaje como atrezzo para su película. Ante el éxito que consigue se dará cuenta de que necesita más partes humanas para sus próximos proyectos. Casi ná.

Además de Sasha Grey, Smash Cut está protagonizada por varias leyendas del cine gore, como son Herschell Gordon Lewis, David Hess, Michael Berryman, Jesse Buck y Ray Sager.

Vale, sé que os estáis relamiendo de ganas de verla pero todavía no tenemos fecha de estreno. Jop.


The Girlfriend Experience.

Advierto que soy un fan escéptico de Steven Soderbergh, igual puedo adorarle por Sexo, Mentiras y Cintas de Video, la primera de los chicos de Danny Ocean o Traffic, como odiarle por aburrirme con Un Romance Peligroso o, por Dios, Solaris. Digamos que las últimas decepciones me han hecho alejarme de su cine, lo que incluso parece haberle pasado a él, dado el giro brusco que ha tomado con las dos entregas de la vida del Ché o esta The Girlfriend Experience.

Se trata de la historia de Sasha Grey, una joven y cotizada prostituta que trata de ganarse la vida de esa manera tan fina, a diez mil pavos el arrimón, eso sí, con el consentimiento de su novio. Claro, tendrá que haber dudas y broncas, si no no habría película tampoco.

Así, The Girlfriend Experience pretende mostrarnos de paso la crudeza del mundo de la prostitución de lujo, en este caso en Nueva York.

Como no se han gastado tres perras en rodarla, tampoco hay grandes nombres en un cartel que parece jugar todas sus bazas a la publicidad extra que le dará el tener a una pornstar conocida en el papel principal.

Los que ya han visto The Girlfriend Experience no se ponen de acuerdo, o la califican como basura o como absurda a secas. Desde un punto de vista social podría parecerme interesante, pero me temo que muchos de los que vayan al cine a verla lo harán por el placer de disfrutar a su musa favorita en pantalla grande. Lo siento por Soderbergh, no sé si estos sabrán apreciar -o les importará un carajo- su trabajo tras las cámaras.

En fin, parece que la buena de Sasha Grey ha decidido ampliar sus horizontes y dedicarse solamente a chupar... planos.

En todo caso, bienvenida.