sábado, 28 de mayo de 2011

Críticas: RED


Hacía siglos que una película de acción divertida no me parecía de tan buena acción y tan divertida. El desparrame comiquero de Bruce Willis y compañía en RED realmente me ha sorprendido porque sin tener ni pajolera idea del cómic en que se basa me transportado durante un rato a esa pantomima de espías retirados, conspiraciones imposibles y acción milimetrada.

La primera palabra que viene a la mente al recordar RED es repartazo. Junto al gran Bruce se lo pasan bomba Mary-Louise Parker, Helen Mirren, Karl Urban o Morgan Freeman, pero sobretodo John Malkovich, en un papel descerebrado como pocos.

RED mola.




Frank Morris es un agente retirado, un espía implacable y un infalible aniquilador de objetivos que en un planteamieto muy similar al de Mentiras Arriesgadas intenta mantener una vida normal en un mundo al que no está acostumbrado. Sus relaciones sociales se limitan a contacto telefónico con su banco y todos sus esfuerzos se concentran en conservar su anonimato y esconder su verdadera identidad.

Pero claro, con eso no habría película, la gracia de RED empieza cuando la casa de Frank es atacada y debe comenzar una huída que primero le mantenga con vida y después le ayude a averiguar quién y por qué quiere darle el pasaporte.


Para ello se rodeará de antiguos compañeros, a cuál más pasado de todo, y con un despliegue surrealista de canas, arrugas y sobretodo facultades sobrehumanas para afinar el tiro y planear locuras, la pandilla de abueletes retirados -eso significa RED, algo así como el cajón de sastre de los espías jubilados- se abrirá paso entre la maraña de secretos confidenciales que pretende limpiar los restos de una operación militar pasada.




En conjunto RED es una gilipollez como un castillo, un cine palomitero y amable que apenas sirve para pasar el rato. Pero cuántas veces no nos quieren colar propuestas similares y nos aburren como cochinos. Pues lo dicho, con su simpleza y su buen rollo, RED mola.


Read more...

Críticas: El Rito.



No tengo muy buenas experiencias con el Anthony Hopkins post-El Silencio de los Corderos. A excepción de su exagerado Van Helsing en Drácula y poco más no termina de gustarme ni siquiera en sus otras apariciones como Hannibal Lecter. Por eso antes de ver El Rito sólo esperaba no volver a decepcionarme.

Esa era mi expectativa, que Anthony Hopkins me encajase, y bueno, la verdad es que dentro de una peli regulera nos este gran actor el que da la mala nota. La baja impresión viene a cuenta de un guión que flojea y de una puesta escena demasiado fría y convencional para lo que quiere contarnos.



Porque la premisa de El Rito no está nada mal, y presenta un comienzo interesante apoyado principalmente en el buen hacer del joven actor que interpreta al descreído y traumatizado sacerdote. Colin O'Donoghue interpreta a ese chaval impulsado al sacerdocio pero que para nada cree en él.


A este muchacho le encargan el paquete de estudiar para exorcista, ahí es nada, y en su año de Erasmus en Roma le toca conocer al Padre Lucas Trevant, Anthony Hopkins, que este sí que es un pro de lo de sacar espíritus de los cuerpos.


El Rito es una película correcta que cumple lo que se espera de ella, inquieta, absorve y asusta por momentos, sin embargo se recrea en un último tercio fantasioso y demasiado entregado al espectáculo en el que toda la medida y lograda sobriedad anterior -que era lo que le daba entidad y distinción hasta entonces, separando a El Rito de otros subproductos de exorcistas y posesiones-, se diluye hasta el ridículo y la parodia dejando al espectador fuera de una historia que se prometía buena y termina en una más.

Read more...

  © Blogger templates Psi by Ourblogtemplates.com 2008

Back to TOP